Si estás creando un vídeo para tu canal de YouTube (si estás leyendo este artículo suponemos que sí), te habrás dado cuenta de la importancia de elegir la pista musical perfecta para tu proyecto.
¡Ojo!, no es tarea sencilla; ni todas las obras musicales sirven ni todas están disponibles para ser usadas.
1) No todas las obras musicales sirven.
Muchos youtubers y creadores de contenido no aciertan en la elección de la música.
¿En qué se traduce esto? En temas musicales que claramente no encajan en tu proyecto, lo deslucen y desvían la atención de lo verdaderamente importante.
Ejemplos:
• Una entrevista que tiene como fondo una potente pista electrónica y eclipsa la conversación.
• Una escena de naturaleza donde todo es idílico y perfecto, salvo la pista de reggaeton que suena de fondo.
• Una pista musical excesivamente corta que se repite en loop 25 veces.
Con referencia al primer ejemplo, recuerda siempre que la música debe servir para acompañar (especialmente en los momentos en que el centro de atención no debe ser la música) y realzar, ideal para todas aquellas secciones donde la música pueda incrementar la efectividad de la imagen o el vídeo.
Si el foco de atención de tu vídeo está en una conversación o en un slogan, ¡no lo ocultes!; en su lugar, elige una obra suave, que sirva como fondo, algo tranquilo y sin sonidos estridentes ni golpes de efecto.
Evita a toda costa los temas vocales, pues no es buena idea añadir una voz sobre otra voz, y puede resular confuso.
Sobre el segundo ejemplo, es importantísimo elegir correctamente el estilo musical. Si estás haciendo un documental sobre el palacio de Versalles,
una obra de corte clásico encajará bien, un tema de rap lo arruinará.
Si estás creando un vídeo para promocionar tus clases de fitness, una banda sonora de piano lenta no sería la mejor elección.
Otra cosa importante que mucha gente suele pasar por alto es que no es necesario que la música suene todo el tiempo.
En ocasiones es preferible no incluir música, o añadirla únicamente en momentos puntuales. No hace falta que una pista suene desde el segundo 1 hasta el último fotograma.
Casi siempre, menos es más.
En relación al tercer ejemplo, utiliza las pistas y loops cortos preferiblemente para transiciones entre secciones de tu vídeo, para abrir y cerrar una sección o como presentación de tu canal, marca o producto.
Evita que suene lo mismo una y otra vez durante varios minutos.
Cuando vayas a añadir música a tu vídeo recuerda que el sonido también es importante, y es algo que mucha gente pasa por alto.
Utiliza sólamente pistas con alta calidad de sonido, preferiblemente WAV o mp3 320kbps. Sin ruidos de fondo, pops o cliks.
Evita grabaciones caseras, pues suelen ser de baja calidad, hechas con micrófonos cuestionables.
Piensa también que, aunque comenzar y terminar la música bruscamente puede resultar efectista
en algunas ocasiones, en otras es mejor empezar y acabar de forma suave.
El volumen de la música también es algo que debes cuidar.
2) No todas las pistas están disponibles para ser usadas.
¿Qué quiere decir esto? Pues que te puede encantar la música de Bruno Mars, pero cuando YouTube detecte que la estás usando ilegalmente, eliminará tu vídeo (aun cuando no lo estés monetizando).
La solución consiste en utilizar canciones libres de derechos de autor o sin copyright.
¡Cuidado! Música sin derechos de autor o sin copyright no significa que la canción no tenga dueño; de hecho, siempre lo tiene (compositor, productor, propietario de los derechos...).
Significa que no está registrada en ninguna sociedad de gestión de derechos de autor, como la SGAE, ASCAP, BMI, SACEM o GEMA, y sólo tendrás que pagar por esa música una sola vez, o ninguna.
Las obras que ya han pasado al dominio público son una buena opción; la única pega es que los estilos son mucho más limitados y casi únicamente encontrarás música clásica (partituras en su mayor parte y grabaciones bastante antiguas).
Recuerda, además, que una obra musical de dominio público grabada recientemente sí tiene copyright. Por ejemplo, "La Flauta Mágica" de Mozart no tiene copyright, porque se escribió en torno a 1790,
pero una grabación de la Flauta Mágica interpretada por la Orquesta Filarmónica de Berlín en 1990 sí tendrá copyright.
Así que si quisieras usar un aria de esta famosa ópera tendrías que encontrar una grabación que tuviese entre 50 y 100 años (el tiempo de expiración de los derechos es diferente en cada país).
Hoy en día hay multitud de catálogos y webs que ofrecen música libre de derechos; la mayoría son de pago, algunos de ellos con muy buena calidad.
Otras ofrecen licencias Creative Commons, que en ocasiones pueden resultar complejas: CC BY-ND o reconocimiento sin obra derivada, CC BY-NC para uso no comercial, CC BY-NC-SA para uso no comercial y con atribución o CC BY-NC-ND, la más restrictiva de todas.
Un océano de licencias, cada una con sus propias particularidades, usos y restricciones.
De ahí que usar música sin copyright para tus vídeos de YouTube sea la mejor opción.
A continuación os dejo una lista de temas libres de derechos de autor y sin copyright, gratis para uso comercial y personal, descargables en formato mp3 de alta calidad, para usos ilimitados, en todo el mundo y para siempre.
Al lado de cada tema encontrarás los usos más adecuados, el tipo de vídeo con el que encajaría mejor y con el que no deberías usarlo.
Esta selección incluye piezas de distintos estilos y duraciones, para varios tipos de proyecto: intros, presentaciones de producto, trailers, programas infantiles, spots publicitarios, fitness, documentales y más.